Índice
Principales conclusiones informe “Digital Economy and Society Index” (DESI) 2020.
Acaba de ver la luz una nueva edición del estudio “Digital Economy and Society Index” (DESI) 2020, realizado por la Comisión Europea, con el objetivo de analizar el estado de la adopción de las nuevas tecnologías en el ámbito empresarial.
El estudio pone de relieve que las empresas europeas han avanzado en sus procesos de transformación digital durante 2019, un hecho que se ha acelerado en 2020 a raíz de la crisis sanitaria del COVID-19.
En el cuadro se aprecian cómo la intensidad en la implantación de las diferentes tecnologías es mayor en las grandes empresas que en las pymes. A pesar de ello, se observa que también las pequeñas empresas están dando pasos en su proceso de digitalización.
En cuanto al uso de soluciones de planificación de recursos empresariales (ERP) para la gestión integrada de procesos, un 33 % de las pymes ya ha adoptado esta tecnología, y el proceso se acelerará en 2020.
Las plataformas de gestión integradas, sobre todo aquellas basadas en la nube, se están revelando como una herramienta fundamental para el crecimiento y la competitividad empresarial, como pone de relieve el dato de que el 78 % de las grandes empresas europeas ya lo usan, abriendo el camino a las firmas más pequeñas.
La utilidad de las herramientas de gestión comercial y relación con los clientes (CRM) también queda patente con el dato relevante: casi un tercio de las pymes europeas las utilizan como solución para optimizar sus campañas y el control de la actividad comercial. Un dato que, una vez más, refleja la confianza en estas tecnologías a la hora de impulsar las ventas.
En cuanto al uso de espacios de e-commerce (tiendas online), con datos de 2019, el estudio indica que todavía solo un 18 % de las pymes utiliza este canal de ventas, un dato que parece pequeño, pero que se ha incrementado de forma notable en los últimos años, y mucho más en este 2020, a raíz de la crisis sanitaria. El comercio electrónico es una herramienta para la que todos los expertos apuntan un protagonismo cada vez mayor en los próximos años.
Por último, merece señalar la gran presencia de las pymes en las redes sociales, un canal de comunicación que va en aumento y que está demostrando, por su inmediatez y cercanía, su eficacia como medio de estar en contacto con clientes y colaboradores.
El uso de la nube para servicios de media y alta complejidad, como el alojamiento de bases de datos o software de gestión, como ERP o CRM, todavía se encontraba en un 17 % según el último dato (2018).
Evidentemente, esta tendencia se ha acelerado por la crisis sanitaria. Las razones para utilizar la nube se apoyan en que permite la continuidad del negocio en cualquier situación, facilita el teletrabajo y refuerza la cultura digital de la organización. Sin duda, es una tecnología clave para el futuro de las pymes.
En cuanto a las herramientas de análisis de datos (Big Data), solo un 12 % de las pymes europeas la usan para la elaboración de informes y la toma de decisiones. A pesar de la efectividad probada de estas soluciones, todavía queda un largo camino en su adopción masiva por parte de las firmas más pequeñas.
Existen soluciones de Business Intelligence muy asequibles y altamente parametrizables que resultan fundamentales para analizar datos de múltiples orígenes y tipologías y tomar decisiones confianza.
La digitalización de las pequeñas empresas, ahora más fácil y accesible.
Algunas de las barreras que existían para que las nuevas tecnologías fueran adoptadas por las empresas más pequeñas eran su complejidad y requisitos de inversión. Ahora, los nuevos modelos en suscripción y los proyectos concebidos como “llave en mano” (funcionalidades y servicios fijados a precio cerrado) hacen posible que, por ejemplo, empresas en las que solo necesitan trabajar con un ERP o un CRM tres o cuatro personas, adopten soluciones de gestión de primer nivel tecnológico (características funcionales, seguridad, trabajo con dispositivos móviles, actualización permanente…) sin asumir riesgos ni sufrir impactos en su tesorería.
Ya hemos visto que el uso de la nube sigue creciendo en las empresas europeas; en gran medida es consecuencia de estos nuevos modelos de comercialización y despliegue en entornos remotos (configuración telemática, formación online, soporte interactivo multicanal…). Todo ello contribuye a que, por fin, la digitalización de las pequeñas empresas sea una realidad.
Apoyo del Gobierno de España a la digitalización de las pymes.
El camino a la digitalización no tiene vuelta atrás, y tiene que llegar a todo el tejido empresarial, incluyendo a autónomos y pequeñas y medianas empresas.
Ya hemos visto que los procesos de transformación digital se han acelerado en los últimos meses, por las razones conocidas, pero ahora se trata de que las nuevas tecnologías se adopten con criterio y con visión estratégica, a medio y largo plazo.
En su momento, hablamos de las barreras existentes en las pequeñas y medianas empresas a la hora de acceder a las tecnologías de gestión: una oferta de soluciones tecnológicas muy amplia y dispersa, muchas veces no adaptada a su sector y tamaño, costes y tiempos de implantación altos y necesidades de personal cualificado y con formación en el uso de las TICs.
Hemos visto que la nueva generación de soluciones de gestión en la nube rompe con estas barreras y ahora son accesibles a cualquier empresa. Pero, además, el Gobierno de España, a través de diferentes mecanismos y líneas, apoya la digitalización de las pymes con una serie de recursos que harán todavía más fácil la adopción de las nuevas herramientas digitales. En este sentido, ya está disponible el portal Acelera Pyme, que, en un solo sitio, unifica toda la información relacionada con el acceso a las nuevas tecnologías para pymes y autónomos. En concreto, agrupa todas las soluciones, servicios, ayudas y herramientas ofrecidas por entidades colaboradoras tanto del sector público como el privado, por ejemplo:
- Soluciones tecnológicas (ciberseguridad, teletrabajo, e-commerce, gestión de clientes -CRM-, ERP, Inteligencia de negocio o infraestructuras).
- Talento (programas formativos).
- Asesoramiento.
- Financiación.
- Ayudas.
- Subvenciones.
Hay pues muchas razones para que la pequeña empresa inicie su digitalización. Rotas las barreras y apoyada por las instituciones, con nuevas herramientas diseñadas para su tamaño y necesidades, ahora pueden competir en igualdad de condiciones en un mercado donde la tecnología será el aliado imprescindible.
